¿Qué nos deparará el mañana? ¿Cómo evolucionará la sociedad y la tecnología en las próximas décadas? Aunque no podemos predecir con certeza lo que sucederá, existen herramientas conceptuales que nos ayudan a entender y explorar las posibles direcciones del futuro. Una de ellas es el "Voroscope" del Dr. Joseph Voros, un investigador australiano que ha esbozado un modelo en forma de cono para clasificar y analizar diferentes escenarios futuros y de la cual hay que destacar cuatro elementos:
El Voroscope y sus Cuatro Elementos
Para entender estos cuatro elementos, tomemos un ejemplo. Supongamos que en una sociedad se busca que, en unos años, sea posible que todos los medios de transporte sean eléctricos. Aquello es un futuro preferible y desde que se plantea esta meta es un futuro posible, pues podemos imaginarla. En la medida en que la tecnología se desarrolla y se crean los primeros prototipos de vehículos eléctricos, entonces entramos al terreno del futuro plausible, y posteriormente, en la medida en que se comienzan a adoptar este tipo de vehículos entonces se está ya en un escenario de factibilidad, es decir, en el futuro probable.
Dentro del cono del futuro, aquellos futuros probables son los que se encuentran más próximos al presente. De hecho, en el presente es en donde se comienzan a manifestar las señales de ese futuro próximo.
En otras palabras; en el futuro cercano existen escenarios cuya probabilidad de que sucedan es amplia, pues sus condiciones de posibilidad se han ido articulando y de hecho ya son parte de la realidad de algunas cuantas personas. Reconocer estos escenarios del futuro cercano y estar preparados para ellos es, precisamente, Near Future Thinking®.
Así que, future hunters,: ¿cómo detectan ustedes esas señales del futuro cercano? Es hora de poner en acción su capacidad de prospectiva y descubrir juntos lo que nos aguarda en el futuro cercano. #NearFutureThinking #Futuro #Tendencias